Política | Edificio en ruinas

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Cierre de CESAC 31

El CESAC 31 en Flores cerró sus puertas de forma indefinida después de que el director del centro, Sebastián Carrasco, recibiera una descarga eléctrica de una pared deteriorada con humedad, hecho que se suma a los tantos que vienen sufriendo a causa de la precariedad edilicia del centro de salud. No hay planes oficiales de rehabilitar el lugar con las obras requeridas. Por Mailén González
Buenos Aires, 13 de enero de 2023. El lunes pasado se realizó en las puertas del Centro de Salud una concentración y abrazo a la salita ubicada en el Barrio Illia, en el Bajo Flores. Trabajadores y vecinos denuncian graves problemas de infraestructura, que ponen en riesgo a pacientes y trabajadores. Los legisladores por el Frente de Todos, Matías Barroetaveña y Berenice Yañez se acercaron al CeSAC para acompañar y escuchar el reclamo de los trabajadores y trabajadoras y los vecinos del barrio Illia.

Edgardo Knopoff, jefe del área programática del Hospital Piñero, la Asociación de Médicos Municipales y varias organizaciones sindicales, junto a  Carrasco y los trabajadores vienen denunciando el riesgo eléctrico, la falta de agua y filtraciones permanentes que hace inseguro el trabajo y la atención a los vecinos y vecinas que se acercan a este CeSAC.

El cierre implica, además, que cientos de pacientes se quedan sin recibir sus tratamientos de la farmacia que funciona dentro del centro. “Las autoridades del CESAC nos comentaron que si cierran son 300 pacientes con medicación crónica, entre los que hay 150 pacientes insulinizados, que se quedan sin medicación”, dijo la diputada Yañez.

“Los arreglos provisorios que se hicieron hasta ahora no son suficientes. Los trabajadores y trabajadoras necesitan una solución definitiva para trabajar y poder brindar una atención de calidad. Exigimos al GCBA una respuesta urgente que permita la continuidad de este centro de salud comunitario”, expresó Barroetaveña.

La situación de este CESAC, como la de otros centros de salud que se encuentran en conflicto son responsabilidad del jefe de gobierno Horacio Rodriguez Larreta, el ministro Fernán Quirós y el subsecretario de salud comunitaria Gabriel Battistella. El abandono en el que se encuentran los CESAC, mayoritariamente en el sur de la Ciudad, constituye una deuda histórica que tiene el Gobierno de la Ciudad  con los vecinos de los barrios.

Es responsabilidad de las autoridades a cargo que den respuestas claras sobre cómo seran las obras y cuales serán sus plazos y que informen a la comunidad como se sostendrán, durante el tiempo de la obra, los servicios que presta actualmente el centro.

Lxs trabajadores cuentan que desde hace varios años vienen denunciando las deplorables condiciones de infraestructura y que, en noviembre pasado, se agravaron. “Tenemos electrificadas las paredes, pérdidas de agua en los consultorios. Estamos trabajando de manera precaria, no podemos desarrollar nuestra actividad diaria y por ende los pacientes se quedan sin atención” cuenta Gustavo, odontólogo del centro de salud 31.

La situación en los últimos meses se agravó, ya que varios trabajadores recibieron descargas eléctricas, lo que provocó que se cierre el centro en noviembre. Denuncian que fueron a arreglarlo pero que no solucionaron el problema estructural. En palabras de Eustaquia, vecina del barrio Illia: “hicieron un arreglo así arribita, cerraron dos semanas y cuando volvieron a abrir, seguimos teniendo los mismos problemas”.

Este CESAC tiene una estrecha relación con el barrio. Así lo definió Corina, psicopedagoga de la institución: “La gente tiene una conexión y un vínculo con la institución, por eso la gente se autoconvocó hoy acá, los vecinos que se enteraron que no iba a abrir el centro, se acercaron para visibilizar lo que está pasando”.

Para las familias que viven en el barrio el centro es un lugar muy importante ya que es prácticamente la única forma en la que se puede garantizar su salud: “Todos los chicos de acá del barrio están todos vacunados, te preguntan siempre qué te falta, reciben la leche. Hay de todo para la gente, por eso nosotros lo necesitamos” nos cuenta Eustaquia.


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